El Pueblo Embera ha iniciado la marcha de la gran MINGA EMBERA que se realiza durante los días 10, 11 y 12 de octubre de 2005, entre Santa Rosa de
Cabal (Departamento de Risaralda) y Manizales (Departamento de Caldas) con
el objeto de fortalecer sus procesos internos por la pervivencia como Pueblo, su unidad, territorios, cultura, identidad, derechos humanos y también para denunciar ante el país y la opinión pública internacional la desatención del Estado a sus requerimientos ancestrales, particularmente a su reconocimiento y respeto como Pueblo.
El Pueblo Embera es víctima de la ocupación de sus territorios, del despojo de los recursos naturales, desapariciones y asesinato de los líderes, desplazamiento y desatención a las necesidades básicas, desconocimiento de
sus autoridades y formas de vida, del conflicto armado, de las políticas gubernamentales inconsultas que apuntan a la división de sus autoridades y
formas organizativas propias.
Sin embargo, el Gobierno del Señor Uribe en vez de consultar y concertar con
las autoridades indígenas y sus organizaciones nacionales, regionales y locales, ha emprendido una estrategia perversa para minarnos en las luchas
ancestrales de resistencia, para desconocer la obligación del Estado a consultarnos en todo lo que nos afecta e interesa, para facilitar el camino
del despojo a nuestro territorio y cultura por parte de sus aliados de las empresas transnacionales, como lo pretende con el TLC, la ley forestal, el
manejo de los hidrocarburos, la exploración y explotación de nuestra biodiversidad.
Pero esta marcha pacífica acaba de recibir la notificación perentoria del Gobierno de no poder avanzar porque en este país de supuesto estado social
de derecho, los indígenas no podemos marchar en minga, no podemos protestarante un gobierno autoritario que desconoce los derechos fundamentales, que pretende mantenernos en la invisibilidad ante un nuevo aniversario el próximo 12 de octubre de la invasión y genocidio europeo a nuestros pueblos y territorios nativos.
Exigimos al Presidente Uribe, su Ministro de Defensa y el Gobernador de Caldas que respeten el derecho de los pueblos a marchar pacíficamente como
lo desea el Pueblo Embera y que en vez de estar conspirando en contra de los
pueblos nativos, nos consulte para concertar todo lo que tiene que ver con
nuestros intereses y derechos ancestrales que están siendo desconocidos por
sus políticas y acciones inconsultas, en vez de llamamos a que de verdad
concertemos una auténtica política de estado para los pueblos originarios.
Bogotá D.C., octubre 10 de 2005
Movimiento de Autoridades Indígenas de Colombia – A.I.C.O.